Hablar de la Raza del Harton del Valle, es remontarse al año 1538 y traer al texto el nombre de un personaje clave como Sebastián de Belalcázar, conquistador español quien llegó a poblar al valle de Pubenza, hoy Popayán, posteriormente al Valle del Cauca. A su llegada trajo este ejemplar, quien con los años se fue poblando, hasta multiplicarse y llegar a otros departamentos como Cundinamarca y a la zona de la región caribe por el lado de Mompox.
En la actualidad la Hacienda Verona, en el municipio de Zambrano, Bolívar, se caracteriza por la producción ganadera de este ejemplar y para Marino Valderrama, propietario, son varias las ventajas y ganancias que se obtienen.
Como primera medida, es importante saber de dónde proviene su nombre, se da por la forma de los cuernos, cuyo parecido y tamaño se les compara con el plátano Harton, sin embargo “para tener un mejor manejo del animal a las dos semanas de edad se les realiza el proceso de topizar” indicó Valderrama.
Características
Los colores varían desde el amarillo claro hasta el rojo cereza, pasando por el hosco al barcino, tonos comunes; los nacidos en Verona son de una coloración amarillo iballo, en su fisionomía se evidencia pequeños pliegues alrededor del cuello, así mismo en su maxilar y alrededor de los ojos, lo cual permite que se disipe mejor el calor.
El pelaje se denomina por ser corto, a diferencia de las razas introducidas que tienen de 8 a 10 milímetros de largo, el del criollo es de 4 a 5, lo que les permite hacer más evapotranspiración y se adquiere mayor resistencia contra la garrapata porque tiene menos agarre.
Su cola es delgada, un prepucio bien adherido al abdomen, “la selección natural ha hecho que todo lo que tenga prepucio largo se enferme, se obstruya y no se reproduzca, mientras los que tiene el prepucio bien adherido son aquellos que toleran pastos altos, permitiendo mayor reproducción, eso es producto de muchos años de selección natural” comentó Valderrama.
Se encuentra en ellos una mansedumbre, estos son animales de potreros y son muy mansos, no son tan ariscos como cuando se empieza a ver el cruce con cebú.